MERCOSUR: 17 años como herramienta de desarrollo y de integración

Se cumplen hoy 17 años de la firma del tratado de Asunción, acta fundacional del Mercado Común del Sur (MERCOSUR) consensuado en la capital paraguaya en el año 1991 reuniendo a la Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, como países que buscaban fortalecer no sólo las relaciones comerciales, sino también las sociales y culturales dentro de un nuevo contexto de progreso para la región. El MERCOSUR tiene el mérito de adaptar los instrumentos comunes a las realidades distintas de cada Estado miembro, respetando las características de sus bases económicas y políticas.
 
MERCOSUR es sin duda el proyecto de integración latinoamericano más exitoso, hecho que quedó demostrado con nuevas solicitudes de adhesión como la de Venezuela en el 2006, país que ya es proceso de adhesión al bloque, y la de Bolivia también en ese mismo año.
Además MERCOSUR cuenta con Estados asociados al bloque como Chile (1996), Perú (2003), Colombia (2004) y Ecuador (2004). El carácter de Estado asociado se establece por acuerdos bilaterales, denominados Acuerdos de Complementación Económica, firmados entre el MERCOSUR y cada país asociado.
La firma del acta fundacional de Banco del Sur el 9 de diciembre de 2007 entre Argentina, Brasil, Bolivia, Venezuela, Paraguay y Ecuador resulta otro avance más para la integración económica de la región y para la superación de asimetrías entre las economías nacionales.
El crecimiento del MERCOSUR se revela también en la firma de un TLC (Tratado de Libre Comercio) en el año 2007 con Israel. 
Orígenes del MERCOSUR

Podemos encontrar antecedentes cercanos del MERCOSUR en la Asociación Latinoamericana de Libre Comercio (ALALC) y la Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI). La primera fue creada mediante al Tratado de Montevideo del 18 de febrero de 1960 entre Argentina, Brasil, Chile, México, Paraguay, Perú y Uruguay, sumándose luego Colombia (30 de septiembre de 1961), Ecuador (3 de noviembre de 1961), Venezuela (31 de agosto de 1966) y Bolivia (8 de febrero de 1967).

Estos países se comprometieron a crear una zona de libre comercio en 12 años, (al 31 de diciembre de 1972), pero luego, por el Protocolo de Caracas el plazo fue modificado a 20 años. El proceso se debió llevar a cabo de forma gradual por medio de la eliminación de todas las restricciones, cupos y gravámenes entre los países.
 
Ante la imposibilidad de cumplir los plazos de creación de la zona de libre comercio, se efectuó una ronda de negociaciones que concluyó con la firma del Tratado de Montevideo de 1980 (TM80), el cual crea la ALADI en reemplazo de la ALALC. Las concesiones que fueron otorgadas con anterioridad, pasaron a formar parte de la ALADI. Los países miembros de la ALADI son los mismos en la anterior ALALC, a los que se sumó Cuba en noviembre de 1998.
La ALADI propicia la creación de un área de preferencias económicas en la región, siendo el objetivo final la creación de un mercado común latinoamericano, mediante los siguientes mecanismos: preferencia arancelaria regional, acuerdos de alcance regional y acuerdos de alcance parcial. La ALADI dentro de su estructura jurídica permite acuerdos subregionales plurilaterales y bilaterales de integración, entre ellos los que dieron origen al MERCOSUR.

Con la finalización de las dictaduras militares en la región, comenzó un proceso de aproximación entre la Argentina y Brasil. Los presidentes de esos países firmaron el 29 de noviembre de 1988, en Buenos Aires, el Tratado de Integración, Cooperación y Desarrollo, con el objetivo de alcanzar la completa liberalización del comercio de bienes y servicios, en un máximo de diez años.
Otro avance de capital importancia fue la Declaración Política del MERCOSUR, estableciendo para Bolivia y Chile una Zona de Paz, firmada en Ushuaia (Argentina) en el año 1998. Un hecho que reflejó el entendimiento del bloque para “fortalecer los mecanismos de consulta y cooperación sobre temas de seguridad y defensa”.

A través de tres documentos fundamentales se estableció la estructura normativa: el Tratado de Asunción, el Protocolo de Brasilia, y el Protocolo de Ouro Preto. El primero, firmado el 21 de marzo de 1991, define los criterios principales, el perfil distintivo del MERCOSUR. Los presidentes y ministros de relaciones exteriores de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, suscribieron al Tratado de Asunción para la constitución de un mercado común entre sus países.

Se elaboró un programa de liberalización del comercio, de coordinación de las políticas macroeconómicas, y la instauración de una tarifa externa común y otras normas y regulaciones comerciales que comenzaron a regir el primero de enero de 1995. El espíritu y la intención de este acuerdo exceden el terreno económico de las naciones, avanzando sobre otras áreas, como educación, medio ambiente, y el objetivo de lograr bienestar común de sus poblaciones.

Para cumplir los objetivos asumidos en el Tratado de Asunción, los países firmantes acordaron el Protocolo de Brasilia como sistema de solución de controversias, un mecanismo de resolución de conflictos de tres instancias: negociaciones directas, la intervención del GMC (Grupo Mercado Común) y procedimientos de arbitraje a través de tribunales ad hoc.

En la Cumbre de Ouro Preto (1994) el objetivo fue otorgar una identidad legal al MERCOSUR transformándolo en sujeto de derecho internacional, y permitiendo relacionarse con terceros países como un bloque por el procedimiento conocido como “Cuatro más uno”. Además, los cuatro países acordaron una tarifa externa común para el establecimiento desde el primero de enero de 1995 de la zona de libre comercio y la unión aduanera. El Protocolo de Ouro Preto recompuso el cronograma establecido e hizo más flexible el proceso de integración a través de la constitución de la Unión Aduanera entre los cuatro países.

Fuente: Natalia Soledad Iocca  - MERCOSUR Noticias