Agencia PARLASUR (05/04/2018). Este miércoles en horas de la tarde se reunieron Parlamentarios del Parlamento Europeo para MERCOSUR junto a los miembros del PARLASUR y PARLATINO en la Asamblea EuroLat para debatir sobre los principales aspectos de las negociaciones UE-MERCOSUR.
El Parlamentario argentino Alejandro Karlen, miembro de la Delegación del PARLASUR, realizó una breve presentación referente a la producción de aceite de oliva en Argentina, en la que expuso que hoy día es uno de los principales bienes de producción, en varias provincias argentinas con un alto índice de pobreza y donde trabajan aproximadamente 100 mil personas. Por lo que agregó que se habla del ingreso sin impuestos de ese producto y considerando los altos subsidios europeos, “nos dejaría en una desventaja total y llevaría a la destrucción de la empresa oleica de la Argentina (…) hay que garantizar en este acuerdo que nuestra industria no se vea afectada”, dijo el Parlamentario argentino.
Por otro lado, la Parlamentaria española Clara Aguilera, Presidenta de la Comisión de Agricultura y Desarrollo Rural del Parlamento Europeo, explanó sobre la política de subsidios a la agricultura europea, justificando de que "no se tratan de subsidios a la actividad económica, sino un apoyo a los territorios rurales, no queremos que la gente abandone el campo para irse la a las ciudades, queremos que puedan tener actividades en los campos”. Además señaló que dichas ayudas son destinadas al desarrollo y mejoramiento del medioambiente, debido a las acciones contra el cambio climático.
Por su parte, el Parlamentario del MERCOSUR por Argentina, Diego Mansilla, opinó sobre algunas características de las negociaciones, como lo es la “primarización de la economía y concentración de la riqueza, secretismo y la nula participación Parlamentaria”; a lo que Mansilla explicó que llevaría a la destrucción de la industria nacional argentina. “Estamos viviendo un fuerte incremento de las importaciones industriales y este tratado UE-MERCOSUR va a acelerar este proceso” apuntando que de la forma en cómo está planteada dicha negociación deben preguntarse "a quien favorece: a las empresas, a los grandes grupos económicos o si beneficia a los pueblos".
