Quienes durante años lo supieron todo, miraron para el costado y pidieron no hacer olas con los temas de corrupción, ahora se rasgan las vestiduras y quieren sacarse de encima el tema del ¨compañero parlamentario¨ José López, rápidamente y sin más trámite. Linchamiento público, muy mediático y acá no pasó nada. Hasta parece que alguno teme por lo que Lopez pueda decir.
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Hace unos días se dio un debate en el seno del Parlasur con un tinte bastante hipócrita, por definirlo suavemente: quienes durante años lo supieron todo, miraron para el costado y pidieron no hacer olas con los temas de corrupción, ahora se rasgan las vestiduras y quieren sacarse de encima el tema del ¨compañero parlamentario¨ José López, rápidamente y sin más trámite. Linchamiento público, muy mediático y acá no pasó nada.
Dijimos que NO. Y no fue ni amparo ni protección alguna de la situación gravísima evidenciada con bolsos con millones de dólares robados a los argentinos, ni del intento de esconderlos a mitad de la noche en un convento ni de otros detalles cinematográficos. Fue por respeto a las normas, al Estado de Derecho que impera en los países democráticos y al debido proceso legal para todos los individuos.
Y hoy vemos que nos asistió la razón. No se resolvió al grito en esa sesión polémica, y el tema se derivó a la Comisión de Asuntos Internos del Parlasur que el lunes 11 de julio resolvió darle cinco días a López para que dé su versión de los hechos. Más allá de que esa oportunidad de esgrimir sus defensas no vaya a cambiar su situación en el Parlasur, hicimos las cosas como se deben hacer. Valió la pena sentar este precedente por el bien del Parlasur y de la democracia del bloque. Los que hemos luchado por recuperarla y nos apegamos a la institucionalidad, logramos un punto a favor del Derecho en todo este desgraciado hecho. Promovimos, como debió ser siempre y como siempre hizo el Partido al que represento, el respeto a la legalidad internacional que es el principal escudo que tenemos las patrias chicas. A pesar de que otros crean lo contrario, lo político no puede pasar por encima de lo jurídico.
Intervención del Parlamentario Pablo Iturralde a propósito del Caso López en XXXIX Sesión Ordinaria Parlasur
Señor presidente, coincido totalmente con que hay que aplicar el artículo 30 y expulsar a este señor, pero esto no se hace de bolea. Esto no es un linchamiento; no estamos en un estado de guerra en el que haya que fusilar frente al pelotón y seguir de largo. Hay que ver qué pasó. Quiero saber si este señor tiene algo para decir. Cualquier reo acusado de cualquier cosa siempre tiene derecho a ser escuchado. Quiero saber qué tiene para decir. Quiero que se inicie un proceso de expulsión.
Señor presidente: básicamente, coincidimos con quien expuso antes respecto de una situación sobre la que venimos escuchando desde hace ¡una década entera! Hay una cosa nueva: parece que es éticamente condenable. (…) Siento mucha vergüenza de que a este Parlamento haya venido esta persona. Hubo listas que se hicieron y las votó la gente; las listas las hacen los partidos y se conocen las cosas que pasan. Hace mucho tiempo que escucho hablar de esto; lo nuevo es que lo descubrieron y por eso tenemos un giro en el planteo que se hace. Señor presidente,. (…)Quiero saber qué tiene para decir. Quiero que se inicie un proceso de expulsión. Seguramente, este señor será expulsado, pero quiero que diga lo que tiene para decir. Quiero escucharlo plenamente. Estamos preocupados por la opinión pública, pero cuando lo pusimos en la lista, ¿no estábamos preocupados? ¿Cuánto hace que estaba en el gobierno? ¿En qué provincia? ¿En el gobierno de quién? Todo esto hace a la ética de la política: que pongamos en los cargos a gente seria, sincera, responsable y honesta y saquemos a los otros de los cargos de dirección de la actividad pública. ¡Claro que le debemos una respuesta a la sociedad! La sociedad se está despertando con lo que está pasando en el Mercosur. Yo soy un parlamentario elegido por Uruguay, pero también soy un parlamentario del Mercosur, de manera que hablo de todos los países que lo integran de la forma que quiera. Me podrán decir lo que sea, pero voy a seguir hablando. Señor presidente, hemos discutido este tema a fondo en la bancada que integro y coincidimos en la necesidad de expulsar a este señor, pero no lo hagamos rápido, para que tenga el derecho a hacer los descargos. No lo encerremos para que no se sepa qué tenía para decir. Acá hay muchas cosas más que empiezan a traslucirse. El Parlamento del Mercosur prevé mecanismos de expulsión por razones éticas, lo que no quiere decir que estemos a lo que vaya a decir la Justicia. La Justicia dirá lo que tenga que decir. La Justicia va por el derecho y la ética va por otro lado. Muchas veces, el derecho tipificará delitos de acuerdo con la ética, pero hay cosas que no son delito que rayan en la falta de ética. Creo que, de aplicarse rígidamente un código de ética, habría muchos más que no podrían estar acá. Tenemos que tomar la decisión radical de comenzar la expulsión del parlamentario López y escuchar si tiene algo para decir. Tenemos que seguir el proceso que corresponde de acuerdo a derecho. Esto no es cobrar al grito de la tribuna, sin garantías. Se trata de que tenga las garantías para responder y decir todo lo que tiene para decir. Me parece que el apuro va muy de la mano del silencio.
Pablo Iturralde
Parlamentario del MERCOSUR por la República Oriental del Uruguay.
